Desde ya se puede encargar al comprar tu nuevo Polo el kit R-Line, consistente en añadidos estéticos al coche que le dan un aire más agresivo. Este pack, disponible anteriormente en el Golf y en el Scirocco, llega al pequeño Polo para todos aquellos que no quieran comprarse el R o no quieran esperar a tener ese aspecto y quieran aparentar que lo tienen (hasta que te da por hundir el pie y dejarlos tirados, salvo al GTI que tiene que correr que se las pela).
Este pack trae unas taloneras deportivas, así como un spoiler trasero. Las llantas son específicas y tienen un diámetro de 17″. También se añade el logo R-Line en la parrilla delantera y se cambian las luces de la matrícula por unos leds. Interiormente parece que no habrá cambios, y el precio del kit será de entre 805 y 835€, dependiendo del impuesto de matriculación que tenga que pagar nuestra versión (válido en todas menos en el 1.2 de 75cv, gracias a dios).